Mónica personifica el espíritu de Agent Provocateur, reconocidamente sexy, que es reforzado por su propia sensualidad
Como indica el propio nombre de la marca, las creaciones tratan de sacar la parte más provocativa y sensual de quien los lleva puestos. Así lo capta Tim Pope, que retrata a la perfección las curvas de la actriz en un ambiente victoriano. Jugando con ese halo de misterio, la fotografías y el corto promocional fueron tomadas en una antigua cárcel, que tiene historia de estar encantada, por lo que el morbo está servido por ambas partes.
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